Quito, 28 de junio de 2022
Después de 15 días de las movilizaciones, las cifras demuestran un grave impacto al sector hidrocarburífero. En la actualidad, se ha disminuido la producción petrolera en más de 1,8 millones de barriles, la mayor pérdida la registra Petroecuador con 1´472.272 barriles y la empresa privada 385.348 barriles.
Para evitar el colapso del sector, en los últimos días, en conjunto con EP Petroecuador, la Agencia de Regulación y Control de Energía y Recursos Naturales no Renovables y las Fuerzas Armadas, se han implementado diferentes estrategias para movilizar insumos y diésel a diferentes campos petroleros. No obstante, actos vandálicos -como el ocurrido la madrugada del martes en la provincia de Sucumbíos, donde un miembro de las Fuerzas Armadas falleció y 12 uniformados resultaron heridos, mientras proporcionaban seguridad a un convoy que transportaba 17 tanqueros con combustible (diésel) de Shushufindi al bloque petrolero ITT- limitan la operatividad de los aproximadamente 2220 pozos petroleros que existen en el país.
El Ministro de Energía y Minas, Xavier Vera Grunauer, destacó que la prioridad es mantener operativos los sectores estratégicos. Sin embargo, acciones terroristas como las que se están registrando en diversas provincias del país, pueden provocar que en poco tiempo el área petrolera colapse.
“En 15 días el Estado dejó de percibir USD 166,4 millones, solo en el sector petrolero. Hasta la fecha, se han cerrado 1199 pozos, alrededor del 85% pertenecen a Petroecuador; la operación del SOTE se reactivó el sábado, pero por este lunes se volvió a paralizar por el bajo volumen de crudo. Por su parte, la producción del OCP está disminuida, solo está bombeando el 20% de su capacidad; es decir, 92 mil barriles”, puntualizó el principal de la Cartera de Estado.